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AFECCIONES EN EMBARAZADAS
La frecuencia real de afecciones proctológicas durante el embarazo está mal documentada en la literatura y por lo tanto no se sabe la frecuencia de estas afecciones en este período de la vida de la mujer.
El embarazo genera cambios fisiológicos adaptativos que favorecen la aparición de algunos síntomas anales los cuales no deben confundirse con enfermedades. La hipertensión abdominal por el crecimiento del feto en el vientre materno produce congestión de las hemorroides y edema de la piel perianal, sobre todo si hay plicomas previos, lo cual no requiere un tratamiento específico.
A los efectos prácticos consideraremos las afecciones proctológicas de las siguiente manera:
1) afecciones provocadas por el embarazo: incluye trombosis de hemorroides, prurito anal, neuralgias anales y cambios en el hábito defecatorio.
2) afecciones proctológicas agravadas por el embarazo, esto es, condiciones previas sintomáticas que aumentan en esta etapa. Las hemorroides ya mencionadas, condilomas acuminados (infección por HPV), prurito anal o prolapso rectal.
3) afecciones proctológicas como consecuencia del parto, sobre todo las consecuencias mecánicas por el estrés traumático del periné durante el mismo. Incluye:
4) afecciones proctológicas que ponen en peligro el embarazo:
5) Afecciones colorrectales que contraindican el embarazo:
6) afecciones proctológicas que contraindican el parto vaginal:
Cada afección o lesión considerada se estudiará con métodos no invasivos para minimizar el estrés sobre el feto y se intentará resolver luego del parto, salvo que los síntomas sean muy severos o la enfermedad ponga en peligro la vida materna.